"no te quiero perder";
la noche al silencio
el mar a la luna...
Se nos perdían las horas y las noches en el tumulto ardiente de recuerdos que guardaban tus sábanas y mis ojos. Me matabas la esperanza y me crecía la felicidad. Ahora odio la primera y no sé qué es la segunda. Pasé a ser el tres: desaparezco.
Dienstag, April 19, 2005
Abonnieren
Kommentare zum Post (Atom)
Keine Kommentare:
Kommentar veröffentlichen