Dienstag, September 13, 2005

Otro capítulo....

En el día me la paso escribiéndome creyendo que te voy a encontrar. No sé si se me caen pedazos de piel o si me están creciendo estrellas. Jueves: suficiente dolor y suficiente esperanza. Se me olvidó cómo se escucha la felicidad. Alguien que me ayude a limpiar el piso de mis sueños. Lo normal es que los sentimientos crezcan en paralelo, yo soy una tonta sentimental y me crecen perpendiculares. No te extraño. Y a este último me convenzo de que me refiero a la felicidad porque sé que no se encuentra buscando. Cuando no nos topamos soy un cliché absurdo desnudándome para la noche. Imagino que te asomas por la ventana y vivo el proceso en el espejo pensando que me ves. Pero volteo. Me acerco, me asomo y sólo encuentro oscuridad y un árbol que no me deja compartir mi tristeza con las estrellas. Me siento en la cama pero no me toca. Sola me abrazo; mano izquierda en el seno derecho y brazo derecho cubriendo ombligo y cintura. Me dan escalofríos de pensar que eres tú el que me siente, me erizo. Lo siento. Veo al piso (blanco: la estúpida esperanza se me trepa por las piernas y me llega al hueco estomacal). Se me estropea el momento. Nunca llegas. Te odio.

...y me acabé.

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