Y es una estupidez, porque no estoy a favor de los silencios, y eso era lo que nos hacía buscarnos. Cada día sabíamos menos uno del otro hasta que dejó de haber respuestas. Además de que a ninguno le interesaba preguntar.
Pero de todo eso, lo único que me molesta es que todavía diga "después" cuando los dos sabemos que no. O quizá lo que me molesta es que diga, porque tengo la sensación de escupe las palabras.
Y lo odio, porque cuando yo pido es porque quiero.
Keine Kommentare:
Kommentar veröffentlichen